La oxigenoterapia es una opción de tratamiento recomendada a pacientes con enfermedades asociadas con deficiencias respiratorias con riesgo de hipoxia, esto es, que se produzcan daños a nivel celular por la falta de oxígeno en el organismo. Anteriormente en el blog de Inogen México hemos hablado de las características de algunas de estas enfermedades y del por qué optar por equipos Inogen One es una excelente opción para la administración de oxígeno suplementario. En esta ocasión nos enfocaremos a hablar de una consecuencia de trastornos que se presentan a nivel pulmonar y extrapulmonar, la atelectasia, y del uso de la oxigenoterapia para su tratamiento.
La atelectasia, como acabamos de mencionar, se presenta a raíz de trastornos pulmonares y extrapulmonares y se caracteriza por el colapso del tejido pulmonar, lo que ocasiona una pérdida de volumen en uno o ambos pulmones. Esta pérdida de volumen pulmonar hace imposible que se dé el proceso de intercambio gaseoso y demanda un tratamiento inmediato para evitar la hipoxia y los riesgos de daño tisular y cerebral que implica. El tratamiento de emergencia puede ser una técnica de oxigenoterapia, o bien, el uso de fármacos especiales, pero en todo caso los pacientes con riesgos de atelectasia deben disponer de medios que les permitan actuar ante una situación crítica, ya sea los medicamentos recetados por su médico para tal fin o con equipos de oxigenoterapia, como el Inogen One.
Conviene aclarar que la atelectasia no es una enfermedad ni se considera un padecimiento clínico, sino que se trata de una manifestación consecuente de una patología que afecta el funcionamiento de los pulmones. Son numerosas las causas que se asocia con la atelectasia, pero independientemente de la razón por la que se presenta, cuando se produce una atelectasia se da un colapso pulmonar; este colapso se acompaña de la absorción del aire que se encuentra en los alvéolos pulmonares, siendo precisamente esto lo que ocasiona la pérdida de volumen del pulmón o de los pulmones afectados. Si bien incluso personas que no presentan trastornos pulmonares pueden sufrir una atelectasia, son los pacientes con problemas respiratorios los que se encuentran en mayor riesgo pues no cuentan con los mecanismos necesarios para contrarrestar los efectos del colapso de los alvéolos pulmonares.
En personas sin problemas respiratorios los colapsos pueden contrarrestarse con la respiración continua para mantener los alvéolos abiertos, con respiración profunda, con la conservación de la tensión superficial en los alvéolos y con una tos periódica, con la que es posible despejar las vías respiratorias. Si estos mecanismos no están presentes, o si se llevan a cabo de manera anómala, se presenta la atelectasia que genera una ventilación insuficiente, riesgos de hipoxia y de neumonía por desequilibrios en la ventilación y la perfusión.
Debido a los riesgos que implica una atelectasia, los médicos recomiendan a los pacientes con padecimientos que afectan su adecuada función respiratoria contar con un tratamiento disponible siempre en caso de que llegara a presentarse un colapso. Como ya mencionamos, el tratamiento puede ser el uso de fármacos y oxigenoterapia, pero también se suele indicar tener un control sobre las actividades físicas de esfuerzo para reducir riesgos.
En aquellas personas sin padecimientos pulmonares la atelectasia puede presentarse a raíz de una obstrucción en las vías respiratorias, ya sea por la presencia de un cuerpo extraño o por un tapón de mucosa, por supresión de la respiración o la tos por uso de anestesia, o por adoptar ciertas posiciones, en particular en aquellas personas que presentan obesidad y si se genera compresión en el área de los pulmones. Esto explica el por qué las personas con obesidad son consideradas entre los grupos de riesgo de los colapsos pulmonares y la razón por la que se presentan riesgos al someterse a cirugías en las que se emplea anestesia general, al igual que cuando se usan opioides y hay una sedación excesiva.
No hay síntomas que acompañen una atelectasia, salvo en las situaciones en que se desencadena hipoxemia o neumonía. La atelectasia puede presentarse de manera rápida, y en estos casos se puede presentar insuficiencia respiratoria y disnea, o bien, desarrollarse lentamente en la que rara vez se presentan síntomas; cuando se presenta neumonía como consecuencia de una atelectasia se presentan síntomas como tos y dolor, además de disnea. Por otra parte, los signos de la atelectasia se manifiestan según el área afectada. Si el área es grande es posible que se detecten sonidos respiratorios, disminución en la excursión torácica y matidez a la percusión. Es precisamente por la ausencia de signos y síntomas que resulta difícil identificar una atelectasia, pero si se sospecha de una, el médico realizará una radiografía de tórax para confirmar el diagnóstico. En la radiografía es posible visualizar la pérdida de volumen pulmonar y en algunos casos pueden solicitarse otras pruebas como una tomografía computarizada de tórax, o bien, una broncoscopia para descartar la existencia de otro trastorno.
El tratamiento de la atelectasia incluye la activación de los mecanismos naturales para contrarrestar los efectos del colapso pulmonar, como la respiración profunda y forzar la tos. Mantener una adecuada ventilación y la eliminación de secreciones también es indicado, dirigir la tos, hacer ejercicios de respiración profunda, emplear técnicas de expansión pulmonar, ejercer presión en la vía aérea y el uso de un generador de oxígeno son de ayuda en el tratamiento. Ahora bien, si la atelectasia se produjo como consecuencia de anestesia o sedación excesiva, se emplean fármacos para el alivio del dolor y técnicas para dirigir la tos y de respiración profunda.
Esperamos que esta información les sea de utilidad, les recordamos que existen medidas para prevenir una atelectasia y que si ustedes son pacientes con enfermedades pulmonares es necesario que consulten a su médico, quien indicará qué medidas deben adoptar en caso de que se llegara a presentar un colapso pulmonar. Como ya mencionamos, el uso de oxigenoterapia está indicado, y por comodidad y practicidad, contar con un equipo propio para la administración de oxígeno suplementario como Inogen One es una excelente opción. En Inogen México contamos con diferentes modelos que se adaptan a distintas necesidades, y si desean asesoría en la elección de un equipo pueden contactarnos, para nosotros será un placer atenderlos.