Un concentrador de oxígeno portátil es un equipo médico que funciona mediante una batería para poder administrar a un paciente un volumen mayor de oxígeno para compensar alguna deficiencia provocada por una lesión o enfermedades crónico degenerativas. A diferencia de otros equipos como los tanques de oxígeno, este extrae el oxígeno del ambiente y lo concentra mediante una serie de filtros.
Los concentradores utilizan una serie de filtros para eliminar las partículas en suspensión y las bacterias que existen en el aire y mediante una bomba neumática se capta el aire del ambiente, y lo almacena en una cámara de retención en donde se extraer el O2 y los demás componentes comunes en el aire son expulsados. El volumen de oxígeno que se extrae se gradúa en litros por unidad de tiempo, y se suministra a los pacientes mediante una cánula nasal.
Del 20 por ciento del O2 presente en el aire atmosférica provee una concentración de hasta el 96 por ciento. Para la concentración no requieren ningún procedimiento especial más que la regulación de acuerdo con las necesidades de cada paciente. Al ser portátiles, la energía es suministrada mediante una batería recargable con una autonomía que va de tres a nueve horas, de acuerdo con la cantidad de flujo establecida y el modelo.
Para aprovechar al máximo un concentrador de oxígeno portátil a continuación les vamos a dar algunos consejos del funcionamiento de cada uno de los componentes para su uso adecuado y el mantenimiento de los dispositivos, es especifico de los equipos de la marca Inogen en el modelo One G3, uno de los mejores concentradores en el mercado.
Para el cuidado del equipo concentrador, en general se recomienda realizar una limpieza general al menos una vez a la semana con un paño húmedo con agua y en caso de que esté manchado pueden usar un detergente líquido suave. En caso de una rotura accidental es necesario sustituirlo, puesto que pueden afectar en concentrador en general. Para evitar fallos, manténganlo alejado de los líquidos o del contacto directo con el agua.
Siempre mantengan los filtros y los diferentes puntos de entrada y salida de aire libres de cualquier obstrucción, así como deben evitar los golpes y las caídas accidentales. Los dispositivos Inogen utilizan materiales de alta resistencia, pero un mal manejo puede dañarlos gravemente.
Es importante que les den un mantenimiento constante a los filtros de partículas para un adecuado funcionamiento, lo más recomendable es dar una limpieza semanal con un paño húmedo, aunque antes de volver a colocarlos es importante secarlos correctamente y colocarlos en su posición original; dependiendo del uso del concentrador, los filtros deben cambiarse cada seis a ocho meses. La sustitución es muy sencilla, por lo que pueden hacerla en casa. Los filtros son los encargados de mantener la calidad del O2 que se suministra, por lo que es fundamental que sean sustituidos con periodicidad.
La batería es uno de los componentes más importantes y al mismo tiempo es uno de los más sensibles; asegúrense que en todo momento este limpia y seca. La duración media de las baterías a un cien por ciento de eficiencia es de 500 ciclos de carga, posterior a eso es probable que su autonomía comience a reducirse. En caso de que su autonomía sea muy baja debe ser sustituida, es vital que se utilice el modelo adecuado, de lo contrario se puede dañar toda la electrónica del equipo. Para una máxima durabilidad eviten su uso a una temperatura inferior a los 5° C o mayor a los 35° C. En caso de que el concentrador esté en desuso por periodos mayores a un par de semanas, es recomendable retirarla y guardarla por separado.
Otra parte fundamental que requiere de cuidado especial para aprovechar al máximo el concentrador de oxígeno portátil son las columnas. Estas no requieren de limpieza constante, pero si deben ser sustituidos cada 24 meses aproximadamenre. En ocasiones antes, si es que el dispositivo lo solicita con un mensaje correspondiente en la pantalla; de igual manera están los filtros antibacterianos que son fundamentales para evitar que los pacientes se enfermen por las bacterias que hay de manera natural en el aire. Cada que el concentrador cambie de paciente debe ser sustituido el filtro antibacteriano. Si la máquina es propiedad de un único paciente no es necesario sustituir el filtro.
Por último, están las cánulas nasales, que son el accesorio fundamental para poder suministrar el oxígeno. Es importante que las laven con agua corriente cada dos o tres días y cuente con al menos dos cánulas de reserva, puesto que son fáciles de extraviar o de que se dañen por el mismo uso. No se recomienda el uso de las cánulas por más de dos meses, que es el periodo en que deben ser sustituidas. Para evitar accidentes o roturas fáciles, se recomienda el uso de cánulas con una longitud máxima de cinco metros y que sean compatibles con los equipos de Inogen.
Si siguen estos consejos, podrán aprovechar al máximo su concentrador de oxígeno portátil y evitarán daños que pueden afectar su inversión y provocar que se queden sin el flujo de oxígeno que requieren para compensar sus padecimientos. Los concentradores de oxígeno son herramientas fundamentales para la oxigenoterapia que representan muchas ventajas por sobre los tanques tradicionales, además que son más seguros y pueden llevarlos a cualquier lugar sin mayor esfuerzo.
Los concertadores de la marca Inogen son diseñados para poder funcionar en las diversas condiciones climáticas en las que se encuentre, su tiempo de vida es de varios años, dependiendo del cuidado que tenga el usuario, y si reciben los servicios de mantenimiento periódicos que se recomiendan para su uso adecuado.
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